El cielo taraceado de estrellas ...

"El cielo taraceado de estrellas me anuncia que es hora de irme a la cama". Con esa frase despedía el correo una persona que si digo que es una gran amiga os mentiría, ella está más allá (donde yo no la merezco). Dejaré al margen los detalles importantes para centrar lo anecdótico. Maite me sedujo con la palabra TARACEADO, ahí me quedé. Busqué frases, significados, sinónimos ... TARACEADO. Fui consciente de lo mal que escribimos los proyecto de periodista.

Y me acordé del que es uno de los artículos de prensa que más releo, ahora cumple 3 años, "Palabras que merecen ser salvadas del olvido". Se pretende, dice el artículo, que:

"Escritores de España y América Latina rinden homenaje a la lengua proponiendo rescatar o dar una segunda oportunidad a palabras que empiezan a estar en desuso. Una forma de recordar la belleza y resonancias del español y de contribuir a ampliar nuestro vocabulario".

Mamplora. Vagoroso. Picaflor. Adamar. Cada palabra es un regalo y un reto para que cada uno de nosotros combatamos su falta de uso, combatamos nuestra ignorancia. No es obligado elegir pero ya reconozco que si yo tuviera que hacerlo me quedaría con la palabra escogida por el escritor chileno Pedro Lemebel. Respetando la elección de cada uno yo procuraré no ser un nefando.

Nefando (R.a.e.)

(Del lat. nefandus).

1. adj. Indigno, torpe, de que no se puede hablar sin repugnancia u horror.

Nefando (Pedro Lemebel)

Se dice de quien ejerce el viejo oficio de prestar el ojete para lubricar un falo ajeno. Suerte de pecado que se traduce como uso y abuso de la amapola anal, corta churros, chiquitín o camino desviao en el caso de una woman. Blasfemia sodomal, nefasto, asqueroso, pero exquisito, una delicia vertebral que hace sucumbir al macho más castizo cuando el señor P. les golpea la puerta interior de la próstata con su cabeza leporina. Sacrilegio antinatura y aberración carnal que cometen estos animales, decían los cartas al rey escritas por los curas coños de la conquista, masturbándose en el confesionario.

 
 
Saludos mis queridos prístinos.