Neuroperiodismo

Lo llaman "neuroplasticidad". Me suena su definición, me asombra el extremado mimo con el que esta palabra casa su significado con su significante.  Neuroplasticidad. Quizás Ramón y Cajal, Don Santiago, ya apuntara en su GPS profesional las coordenadas de un término en el que están volcados algunos de los más prestigiosos neuroinvestigadores del mundo, uno de ellos Antonio Damasio. Tan ocupado en las cosas de Vasile y en el vergonzante cierre de CNN +, llevaba un tiempo demorando la lectura de alguno de los trabajos de quien un muy querido compañero me recomendaba día sí día también. Lee a Damasio. Ya cansado de mis largas el viernes de la pasada semana me envió este vídeo de Youtube:


Touché. "Ataca a un sentimiento negativo con otro positivo y ...". Y reflexiono, poco, sobre esta España cainita tan  llena de hijos de puta, dice Pérez Reverte. Y recordaré a Damasio cuando dentro de unos meses, o sea ya, el periodismo cave hondas sus trincheras (como las fosas de Reverte) para manipular a quienes puedan y se dejen manipular. Todos manipularán, todos. Irán a bocados a por nuestras conciencias, lobotomizarán nuestras reflexiones, intentarán comerse la parte posterior de nuestro tallo cerebral. Lo dice el mago del cerebro:
“Si destruyes la parte posterior del tallo cerebral, destruyes la conciencia. Puede que nunca salgas de ese estado vegetativo”

Nos asustarán con el "¡que viene la derecha!", nos agobiarán con el "¡Zapatero ha llevado a España a la ruina!". Y participa que tu voto es decisivo, y no te abstengas porque si no votas no te quejes. Y poco a poco irán neuroplastizando nuestro cerebro. Lo pintarán de rojo o azul según convenga. Y sólo dirán una verdad, ¡no todos son iguales!. Si lees a Damasio aprenderás a discernirlo, si te entregas a los medios no será posible. Ni lo intentes.

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3 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues ya esta "neuropastizado".........

¿Cuantos partidos de izquierda hay gobernando en Europa?

¿Y en el mundo?

¡¡¡ Que mundo !!!

Saludos del ornitorrinco :-)

Ana L. dijo...

Roberto ¡¡dejanos descansar algún día!! (jajajaja). Dejo de sintonizar una cadena y ahora resulta que que me tienen que sobrar todas. No conocía a Damasio y, como siempre, no tengo sino agradecimientos. Chin-chin

La eterna emocional dijo...

Ya te contaré el sentimiento positivo, que usa mi voluntad, para educar a mi razón, para dejar de fumar...ufff también se lo contaré a mi padre, con la esperanza de que él también encuentre su sentimiento positivo y le de la patada al gato de una vez...jajajaja..besos Rober.

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