Osama y Obama

Si el guión lo hubiera escrito Peter Jackson hubiera salido más o menos lo que nos cuentan que ha pasado. Osama bin Laden llevaba meses localizado, lo ha delatado uno de sus lugartenientes, Obama dijo el viernes "¡a por él!", comandos especiales del ejercito USA han entrado en su mansión, lo han hecho de noche, lo han matado, ningún soldado américano ha sido herido, el cadaver del superterrorista ha sido arrojado al mar, el mundo es más seguro.

No hay televisión en el mundo que no repita hoy los argumentos que poco a poco da a conocer el gobierno de los Estados Unidos. Los periodistas hacemos auto de fe. Estamos dispuestos a creernos la mitad de lo que nos cuentan, estamos dispuestos a no preguntar por la mitad de lo que nos evitan. Empotrados intelectualmente, como estamos desde hace años, en los argumentos de los Estados Unidos hoy no es mal día para dejar la fe y ejercer el oficio.  Es sólo una idea, ya sé que tonta.

Dice Noam Chomsky:

"Estados Unidos probablemente sea el país con el mayor grado de libertad de expresión del mundo, el Estado tiene capacidades muy limitadas para reprimirla porque en 1964 abolió el llamado acto de sedición. Pero la libertad tiene muchas dimensiones y otras formas de control, por ejemplo a través del impacto de la concentración de capital."

Dice Ignacio Ramonet:

"Medios de comunicación masiva y mundialización liberal están íntimamente ligados. Por eso, es urgente desarrollar una reflexión sobre la manera en que los ciudadanos pueden exigir a los grandes medios de comunicación mayor ética, verdad, respeto a una deontología que permita a los periodistas actuar en función de su conciencia y no en función de los intereses de los grupos, las empresas y los patrones que los emplean".

Dice Zygmunt Bauman sobre la certeza de la incertidumbre: