La biopsia catódica

Propongo coger un audímetro y subirlo a la azotea de las Torres Petronas, allí arriba querría experimentar si la ley de la gravedad existe en Kuala Lumpur (Malasia), con el audímetro hecho trizas y ya a ras del suelo propongo tomar una muestra y somerterla al análisis de la cordura. Ahí mi biopsia catódica.

El dato es de ayer miércoles. Informativo de TVE en Navarra, emisión de 25 minutos (14h a 14h 25m). Los audímetros de Kantar Media (antes Sofres) le dan un share del 41,1%. El dato, muy bueno, es peor que el del martes anterior, ahí el share marcó un 43%. Y así día sí, día también. ¿Dónde voy? No estoy seguro.

Navarra supera los 40 al mismo tiempo que los informativos de TVE en Madrid, Andalucía o Cataluña están rozando el 10% de share, día sí día también. Sí, imagino tu argumento: "Es que en esas Comunidades las televisiones autonómicas se llevan su parte". Ok, voy con este gráfico; es de cualquier día de algún mes del año pasado:

Once millones de españoles se plantan ante el televisor entre las 20 y las 21 horas de cada día de cualquier semana de cualquier mes, sólo quieren información. Sucedió entonces y sucede hoy. Y aclarando el camino por el que quiero ir pretendo decirte que cada día, nosotros los periodistas, citamos ante el televisor a casi 20 millones de españoles, 20. Y ahora que nos mienten con eso de que la televisión es una empresa más me quiero imaginar a la mitad del país entrando al Corte Inglés. Colapso total, cierre por fin de existencias.

Claro que en esto de la tele todo es verdad y es mentira. Si hasta ahora te contaba que la televisión y sus informativos son muy importantes (que lo son) ahora te cambio el argumento. Vamos a ETB1, el canal en euskera del País Vasco, la autonómica. La franja que ves va de las 10 a las 12 de la mañana, nadie la vió. Los vascos, más de 2 millones, están tan ocupados que no caen en la ETB1 ni por un descuido. Cero.

Y conforme escribo yo mismo voy aclarando el final de mi camino. Antes de llegar a la meta me falta darte un dato; dicen los que de eso viven que en España se invierten cada año en publicidad televisiva unos 2.300 millones de euros. Lo pondré en pesetas que suena más contundente, 428.000 millones de pesetas. Y llegando ya a estos finales voy resumiendo. Aceptando la televisión como la gran máquina de información y por tanto de afectación de conciencias, aceptando la televisión como una enorme empresa en la que se mueven esas cantidades de dinero ¿de verdad que no la maneja nadie? ¿de verdad que todo queda en manos de los audímetros? Tantas veces nos lo cuentan que debe ser verdad; Alejandro Pérez Blanco no deja lugar a la duda: ¿Quién está ahí?